El invierno está aquí para quedarse y con la llegada del frío y las lluvias hay ciertos componentes de nuestro vehículo a los que tenemos que prestar atención. Uno de los más importantes, porque son los responsables de la correcta visibilidad en la conducción, son las escobillas.
Mantener una buena visibilidad en todo momento durante la conducción es algo indispensable, por lo que mantener nuestras escobillas en buen estado también lo es. La pregunta es la siguiente, ¿cuándo debemos de cambiar nuestras escobillas o qué signos nos advierten de que se encuentran en mal estado?
A continuación te mostramos algunos de los síntomas o señales de alerta que presentan aquellas escobillas que deberían ser sustituidas:
- Sacudidas: Si saltan en lugar de barrer de una manera suave. Suele suceder en zonas con clima cálido y soleado como Esto significa que se han deformado por el calor y el caucho debe ser reemplazado.
- Estrías: Si aparecen estrías, puede ser un indicativo de que hay que limpiarlas de manera adecuada. Si una vez limpias el problema persiste, es una señal de que están deterioradas y deben ser sustituidas por otras nuevas.
- Ruido: Es señal de que el montaje es incorrecto y deben ser desmontadas y colocadas de nuevo correctamente o que están deterioradas y deben cambiarse.
- Empañado: Si el cristal se empaña, es que el caucho está muy deteriorado, por lo que también deben sustituirse.
Estos días en los que el viento, las lluvias y el frío son los protagonistas, debes de estar pendientes de todos estos síntomas. Si notas tus escobillas presentan alguno de estos signos, debes reemplazarlas para que la conducción sea segura y óptima. Siempre recomendamos acudir a tu taller de confianza para el cambio y así asegurarte de que tus escobillas estén instaladas de forma correcta.
Recuerda siempre elegir cuidadosamente las escobillas de tu coche, ya que de ello dependerá la seguridad durante la conducción. Desde Andaluza de Inyección, recomendamos a todos nuestros clientes el uso de las Escobillas Bosh, ya que garantizan una conducción segura en las condiciones más adversas.
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